La muerte en trágicas circunstancias del campeón olímpico de maratón en Berlín, Samuel Wanjiru, ha causado honda impresión en la comunidad mundial de maratonianos. Así lo han atestiguado Chema Martínez y Martín Fiz durante la presentación de la II Carrera Proniño, apadrinada por la Fundación Telefónica. Para Fiz “Wanjiru alcanzó la gloria deportiva. Pero existe el problema de que cuando se llega a esas alturas hay que saber digerir tanto el éxito como el fracaso y quizá él no lo lograra plenamente, tal vez fuera todo demasiado rápido. Yo lo conocí personalmente, le entrevisté y me causó una gran impresión. Luego, sabíamos que su vida personal era azarosa pero este final nadie lo esperaba”.
Chema también le conoció personalmente “en una mesa redonda, antes de los Juegos de 2008. En ella me preguntaron a mí que cuales eran mis proyectos y dije que ser campeón olímpico. Luego habló él y dijo que él también lo sería. Yo dije entonces: “pues tenemos un problema porque no lo podemos ser los dos”. Era un gran atleta, muy grande, lo hemos visto por sus resultados. Estas cosas siempre que suceden te dejan frío. Yo corrí a veces contra él, pero siempre detrás. Era muy bueno”.
Ambos veían a Wanjiru como “uno de los que podían, como Tadesse, alcanzar el récord del mundo de Gbreselassie”. Sin embargo, son más escépticos en cuanto a atacar la barrera de las dos horas en maratón, como algunas opiniones sobre el malogrado atleta keniano apuntaban. Fiz no cree que las dos horas “se puedan abordar en breve. Ya soy escéptico con los 2:03”. “Eso” apunta Chema “creo que serán mis hijos quienes lo vean”.