jueves, 15 de julio de 2010

6752. Se calcula que alrededor de mil millones de personas vieron en directo por televisión el gol de don Andrés Iniesta Luján

Foto: http://www.juegalaroja.com

 

Dios es de Tomelloso y de derechas.

Una cosa menos me queda por ver. España, la selección española de fútbol, es campeona del Mundo. Eso es una cosa muy grande, enorme. Y encima ganándoles por la mínima y a falta de tres minutos de los penalities a un equipo odioso y leñero llamado Holanda/ los Países Bajos, que hicieron que me cayera mejor que bien un tal Fadrique Álvarez de Toledo que les repartió estopa algunos siglos antes de que unos ociosos ingleses se inventaran esto del balompié.

El fútbol es la guerra, pero por otros medios, que dijo alguien. Otro dijo, y de éste si me acuerdo, el gran Pier Paolo Pasolini, que el mayor goleador de la temporada "era el mejor poeta del año". El fútbol es odioso, un deporte absurdo, lleno de aprovechados, mercenarios, cuentistas, errores arbitrales, probablemente partidos amañados. A mí cada día me gusta menos, pero soy capaz de irresistirme a la magia de las Eurocopas y de los Mundiales. Se calcula que alrededor de mil millones de personas vieron en directo por televisión el gol de don Andrés Iniesta Luján, un mancheguillo de 26 añitos y apenas sesenta y pocos quilos que juega al fútbol como sólo los elegidos pueden (y juegan). Mil millones de personas son muchas personas. Me decía mi amigo JMM, vallisoletano de origén burgalés para más señas, que la cara de tonto no se le va a quitar al menos en una semana. Sopla, como a mí. Ganar un mundial de fútbol es entrar de golpe y porrazo en la Historia Sagrada de los Héroes. Es formar parte de ese increible club en el que deambulan Diego Armando Maradona, Dino Zoff, Franz Beckenbauer, Romario, Lotthar Mathaus, Zinedine Zidane, Mario Alberto Kempes, Paolo Rossi, Bobby Charlton, Ferenc Puskas, Pelé, Johan Cruyff, Tostao... La historia viva del balompié mundial...

Escrito por Ignacio Bonoso Romero de Contreras en http://ignacioromero.blogspot.com

6751. En el infierno de la estepa. La séptima edición Extrema de Belchite la ganaron Raquel Llamas y Abderraman Chamati

Foto: Blas



El calor, el sol, la canícula y el desierto volvió a ser un escenario inmejorable de la séptima edición de la Extrema de Belchite. Más de 400 participantes, de los que 70 eran andarines y medio centenar de ciclistas, lucharon sin desmayo en una doble jornada que se disputó el pasado fin de semana. La competición organizada por la Asociación de las Naciones Unidas (ANUE) se volvió a consolidar como una cita imprescindible de las pruebas de aventura.
La Extrema de Belchite ya se ha convertido por derecho propio en una mini Maratón de Las Arenas, la prueba estrella que se disputa en el Desierto del Sáhara. Este año hubo algunas novedades. A la competición de carrera a pie y la andada, se unió la bicicleta de montaña.
Pero el plato fuerte volvió a ser la carrera a pie, que se llevó por tercer año consecutivo Abderraman Chamati. El marroquí nacionalizado español terminó el domingo con 2.28.27, siendo el segundo Said El Wardi, a algo más de tres minutos y tercero el binefarense Chicho de la Fuente, a casi ocho minutos del ganador. En mujeres revalidó su título la vizcaína Raquel Llamas, que tuvo que correr a tope para ganar a Mari Ángeles Tetuán y Rosana Álvarez. Llamas terminó en 2.28.27, siendo la primera aragonesa Cristina Giménez, la quinta...