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Usain Bolt no es actualmente el hombre más rápido del mundo, específicamente en el atletismo (100, 200 y 4x100 metros), sino que también podría entrar a la carrera por la lengua más veloz, ya que en cada declaración suya deja de manifiesto su arrogante y extrovertida personalidad.
Hoy el jamaicano no tuvo pelos en la lengua para restarle importancia al récord en los 60 metros obtenido por el inglés Dwain Chambers el mes pasado en el Campeonato Europeo Indoor de Turín, en Italia, ello tras cumplir un año de suspensión por arrojar positivo en un control antidoping.
"Indoor y pista es totalmente diferente. Yo no estoy preocupado de los rivales que hacen indoor. Soy el hombre más rápido del mundo y se que eso significa que debo ganar todas las carreras", aseguró el triple medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.
Para Bolt, "si entreno y me mantengo en forma, no tengo de qué preocuparme de los rivales. Si compito, gano. Las personas pueden hablar lo que quieran. Vamos a ver que pasará cuando corramos juntos. No me tengo que preocupar por nadie".
Cabe recordar que su compatriota, Asafa Powell, ha anunciado que está preparándose especialmente para recuperar su posición como el hombre más rápido del mundo en los 100 metros. De todos modos tendrá que esperar hasta agosto, cuando pueda juntarse con Chambers y Bolt en el Mundial de Atletismo de Berlín.
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