El sueco Mustafa Mohamed, ya recuperado totalmente de su primera grave lesión –fue operado de los ligamentos de la rodilla tras el Campeonato del Mundo de Berlín-, ha recuperado la sonrisa y se entrena sin problemas. Acaba de regresar de Iten, Kenya, donde ha permanecido casi un mes, y ahora hace lo que puede en la nevada Suecia para proseguir sus planes de preparación de cara al Campeonato de Europa de Atletismo Barcelona 2010, su gran objetivo de la temporada.
“Fue mi primera operación y se convirtió en una increíble experiencia emocional. Afortunadamente no era nada complicado y todo salió muy bien. Fue un sentimiento divertido. Caí dormido y cuando me desperté ya había pasado todo. No sentí nada de dolor”, ha manifestado a la página web de la Asociación Europea de Atletismo. El corredor de obstáculos de origen sudanés es una de las bazas del atletismo sueco. Mohamed, a sus 30 años, puede presumir de haber sido finalista en las tres últimas ediciones del Campeonato del Mundo (14º en 2009) y en los dos últimos Juegos Olímpicos.
“Empecé haciendo sesiones de apenas 11 minutos rodando. A mediados de enero ya corría 10 kilómetros y las sesiones eran diarias. He hecho ciclismo y muchos ejercicios de rehabilitación para recuperar la fuerza y la movilidad”, ha explicado Mohamed, que en Kenya ha coincidido con otro habitual de este tipo de “stages” en altitud, el británico Mo Farah.
De vuelta a Suecia, Mohamed ha cambiado el sol por el frío y la nieve es la superficie que pisa cuando sale a rodar. Pero le gusta. Ya está acostumbrado. Se ha perdido la temporada de cross pero su rodilla está ya recuperada. Su única esperanza es llegar a tiempo para competir por la victoria en los 3.000 obstáculos de Barcelona 2010. Fue cuarto en Goteborg 2006 ante su familia y amigos y espera mejorar esa posición en una carrera en la que franceses y españoles pueden ser sus principales rivales. Además del finlandés Jukka Keskisalo.
Su marca personal es de 8:05.75 conseguida en 2007 en Heusden-Zolder. Es el tercer crono europeo de todos los tiempos. Toda una garantía.