APLAUDIDAS. Las integrantes de la Sociedad de Beneficencia fueron homenajeadas por los asistentes al acto.
“La permanencia depende del espíritu, y este es un fiel reflejo del compromiso”, afirmó Elvira Colombres Garmendia de Hebert, presidenta de la Sociedad de Beneficencia de Tucumán, al hablar anoche durante el acto central en conmemoración de los 150 años de vida de la institución. Agregó que el espíritu y el compromiso de servir a los desvalidos se ha ido trasmitiendo de generación en generación a lo largo de la existencia de la Sociedad. Aclaró que evocar el pasado no implica sentir nostalgia sino rescatar la fuerza de las fundadoras y de las mujeres que las siguieron para continuar, en la actualidad, con la tarea iniciada hace siglo y medio.
La obra de la Sociedad fue sintetizada en un video, en el que pudo verse a las mujeres mayores que viven en los tres hogares que sostiene la institución: Anselmo Rojo, La Merced y San Roque. Los proyectos para el futuro son abrir un hogar de día para mujeres; una sala para hombres mayores, una sala de fisioterapia y arreglar el equipamiento de cocina de los hogares. “Sabemos que con la ayuda de Dios y la colaboración de las personas de buena voluntad es posible lograr que las personas que buscan refugio en nuestras instituciones vivan con dignidad”, expresó la presidenta de la Sociedad.
El acto conmemorativo reunió a destacadas personalidades del medio. Entre otros, estuvieron el intendente de la capital, Domingo Amaya; el vocal de la Corte Suprema de Justicia de la Provincia Antonio Estofán; el vicario general de la arquidiócesis, monseñor Melitón Chávez; el presidente de la DAIA, Jaime Salamon; el padre Juan Manuel Alurralde, de la parroquia ortodoxa de la Asunción de María Santísima; el vicepresidente de la Sociedad Rural de Tucumán, Juan Paz Posse; y representantes de la Fundación del Tucumán, de la Cámara de Turismo, de la Unión de Hoteles y de otras entidades de beneficencia de la provincia.
El acto se inició con el ingreso de las banderas argentina, llevada por Felicitas Napp de Nougués, y de la Sociedad, portada por Delfina López Duhart de Frías. Luego se cantó el himno nacional y se proyectó el video. Posteriormente hablaron la presidenta de la institución y Angel Núñez Molina, quien hizo una reseña de los 150 años de la Sociedad.
Seguidamente, la presidenta y las socias subieron al escenario en medio de fuertes aplausos de los presentes. Luego se recordó la labor desarrollada por tres ex presidentas (ver Reconocimiento...) y, a su vez, la Sociedad de Beneficencia fue distinguida por la Municipalidad, por la DAIA, por la Sociedad Rural de Tucumán y por la Fundación del Tucumán.
La ceremonia finalizó con la actuación del trío Fra Tenori integrado por Blas García, Monchi Poliche y Miguel Marengo.
Reconocimiento a lo realizado
Las ex presidentas distinguidas fueron María Elena Rougés de López Pondal (período 1951-1955) -recibió su hijo Manuel-; Lucía Elena Aráoz de García Hamilton (período 1980-1984) y María Delfina de la Vega de Catalán (período 1989-1993). Recibieron una bandeja de plata salteña en forma de una hoja, cuyo cabo estaba hecho de asta.
Fuente: la gaceta.comENLACE:
