Los alcaldes de Zaragoza y Calatayud, la baronesa de Warsage y Fernando Moragreda, en el acto Foto: oliver duch |
"En este lugar, hace ahora 200 años, un ciudadano de Calatayud, de raíces belgas, dio su vida por una idea que sigue vigente. Nunca olvidaremos su heroísmo. Hoy compartimos el mismo ansia de libertad y el espíritu de convivencia en paz. Por grandes que sean las dificultades, en Zaragoza hay gente que no se rinde. Y en Calatayud tampoco". Con estas palabras cerraba ayer Juan Alberto Belloch, alcalde de Zaragoza, el homenaje que se le rindió en el puente de Piedra a José de LHotellerie de Fallois, barón de Warsage.
El 18 de febrero de 1809 una bala disparada por uno de los 60 cañones del ejército francés apostados en un Arrabal en llamas dejó malherido al barón de Warsage. Murió al día siguiente (ayer se cumplían doscientos años), después de dejar una hoja de servicios llena de actos heroicos durante la Guerra de la Independencia.
Tal y como recordaba en el acto de homenaje José Verón Gormaz, poeta, fotógrafo y cronista oficial de Calatayud, Warsage había creado una brigada de vanguardia del Ejército de Aragón, por encargo de Palafox, que se encargó de la defensa de los valles de los ríos Jalón y Jiloca y de los molinos de pólvora de Villafeliche, además de mantener despejadas las comunicaciones con Madrid.
Fue, por méritos propios, nombrado jefe del Estado Mayor del Ejército de Aragón, y tras su muerte su figura se ha ido agigantando con el tiempo.
El homenaje de ayer estuvo presidido por los alcaldes de Zaragoza y Calatayud (Víctor Ruiz), además de la actual baronesa de Warsage, que acudió a la ceremonia acompañada de un grupo de descendientes del militar aragonés.
Por el estamento militar, participaron el general Juan Pinto, comandante militar de Zaragoza y Teruel; y el director de la Academia Logística de Calatayud, Fernando Moragreda.
Tras la intervención del cronista bilbilitano y de los dos alcaldes, se procedió a depositar una corona de flores, que llevaban dos alumnos de la Academia de Logística ataviados con los uniformes blancos de la Guardia Valona. Para cerrar el acto se celebró un breve desfile militar por el puente de Piedra, en el que participaron alumnos de la Academia Logística y la Banda de Guerra de la Brigada de Castillejos II de Zaragoza.