SONRIENTE. Yelena, en Berlín.
Foto: as.com
Á. Cruz
Yelena Isinbayeva ha recuperado la sonrisa. Se quedó sin lágrimas en Berlín, tras perder con la polaca Anna Rogowska, que también la había vencido anteriormente en Londres. Ahora busca revancha y dinero. Revancha, porque no puede permitirse una tercera derrota: comenzaríamos a hablar de cambio en el trono de la pértiga. Dinero, porque si pierde hoy dirá adiós a la carrera por el millón de dólares con el que se premia a los ganadores en las seis reuniones de la Golden League.
Isinbayeva ha reconocido lo que había apuntado desde Moscú su compatriota y gran rival, Svetlana Feofanova: que la derrotó el exceso de confianza. Pero Rogowska busca afianzarse. Desde que está en la élite, Isinbayeba nunca ha perdido dos veces seguidas y ante la misma atleta.
Y no quiere hablar de récords mundiales. "Sólo aspiro a la victoria", dijo.
Fuente: as.com
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