Santi Ezquerro volvía ayer de Sevilla con la doble satisfacción de saberse campeón de España y también de que volverá a vestirse la camiseta nacional en el próximo Campeonato de Europa. El seleccionador le confirmó personalmente que él y el subcampeón de España, Mark Ujakpor, viajarán a Turín dentro de quince días.
- Es su quinto título nacional en pista cubierta, ¿se va a acostumbrar a ganar?
- No, qué va. Ganar es difícil; parece que no, pero cuesta mucho ganar un título.
- Pues no será por la efusividad de cómo lo celebra. No cambia usted el gesto.
- Es que esta vez no tenía claro que hubiera ganado. Yo me había visto vencedor, pero las cámaras de televisión enfocaban a Ujakpor y en la pantalla del estadio yo le veía a él, por eso hasta que alguien vino y me dio la enhorabuena, yo no me convencí de que fuera el campeón.
- Y ahora, ¿al Europeo de Turín?
- Sí, ya me lo confirmó el seleccionador, vamos Mark Ujakpor y yo.
- Los criterios de selección de la Federación Española decían que sólo irían los que tuvieran opciones de llegar a la final.
- Sí, pero eso lo ponen siempre. Aquí no hay mínimas, y yo creo que se han basado en que para ir al Mundial la mínima hubiera estado en 47,20, pues para el Europeo nos llevan a los dos.
- Entonces, doble premio.
- Efectivamente, al menos me queda una carrera más en pista cubierta.
- Volviendo a la carrera del domingo en Sevilla, supongo que el oro le satisface, pero ¿la marca también?
- Bueno, me hubiera gustado hacer marca personal, pero ha sido un invierno muy malo. Apenas hemos podido entrenar de calidad porque la mayoría no disponemos de una pista cubierta para entrenarnos y al aire libre ha hecho mucho frío, ha llovido, ha nevado... la calidad la teníamos que hacer en las carreras y en la temporada invernal tampoco hay muchas.
- Entonces, la marca personal la tendrá que dejar para el Europeo.
- A eso iré. Tengo quince días más para descansar, primero, y luego poder hacer entrenamientos de calidad y afinar un poco.
- En Sevilla se le vio bien en la primera parte de la carrera aunque no cogiera la calle libre en cabeza.
- Mi objetivo era intentarlo, pero no suicidarme por ello. Mark me tenía como referencia, él lo consiguió y yo me veía con fuerzas como para superarle en la contrameta, pero preferí esperar e intentar pasarle en los últimos metros.
Fuente: la rioja.com
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