El potente terremoto registrado en el suroeste de China, que se ha cobrado más de diez mil muertos, no afectó a las instalaciones de los Juegos Olímpicos. En Pekín y Shanghai los empleados de las oficinas se echaron a las calles al sentir el temblor. En la capital no hubo daños visibles y el estadio principal, el Nido de Pájaro, no había sufrido daños, según confirmó el ingeniero del proyecto. La estructura de la instalación más emblemática de los próximos Juegos no se ha visto afectada por el seísmo, ya que está diseñada para soportar terremotos de hasta ocho grados de intensidad. El ocurrido ayer tuvo una intensidad de 7,8 grados en la escala abierta de Richter y provocó más de diez mil muertos, cifra provisional y que aumentará con el paso de los días. El de ayer fue el peor en 30 años en el país asiático, según fuentes oficiales.
En las tres horas posteriores al terremoto, los centros sismológicos nacionales detectaron más de 300 réplicas, algunas de hasta seis grados. El seísmo golpea a un país que intentaba entrar en un clima festivo de cara a los Juegos.
(publicado el mundo deportivo.es)
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