Un estudio de la OCU detecta elevados niveles de grasas saturadas en conocidas marcas de 'chips' y galletas.
Mediante este estudio, que se publicará el próximo mes de junio en la revista OCU-Salud, esta entidad pretende también denunciar la existencia de una legislación permisiva y antiguada, ya que se remonta a 1983, que permite a los fabricantes utilizar en los alimento cualquier tipo de grasa que sea comestible.
La trampa de los 'aceites vegetales'
Así, en un comunicado señalan que esta legislación no obliga a mencionar en el etiquetado de qué grasa se trata, por lo que los empresarios pueden utilizar la mención "aceites vegetales", mención en la que cabe desde el aceite de oliva, hasta el de coco.
Dentro de los productos analizados, destaca la cantidad de grasa que contienen las patatas fritas, un 34%, lo que supone un tercio de la bolsa consumida. En este sentido, la OCU señala que, aunque este producto no se consuma a diario, cuando se hace, se consumen buenas raciones del mismo.
Entre las marcas destacan las Pringles Original, las patatas analizadas con mayor porcentaje de grasa, concretamente 39 mg por cada 100 gramos, seguida de Vidal sin sal que contiene 37 mg, las Lays al punto de sal, con 34 mg y las Santa Ana con 31 mg por cada 100 gramos.
La bollería, un 24% de grasas
A las patatas fritas le siguen los aperitivos de bollería, con una media de un 24% de contenido graso. Eso sí, según destaca la OCU, el colesterol se limita a aquellos productos que contienen entre sus ingredientes huevos, grasa láctea, nata o mantecas. De este modo, los Bizcochos Fontaneda contienen hasta 88 mg por cada 100 gramos y le siguen los Madame Brioche con 80 mg y La Bella Easo Rosquillas con 62 mg/100 gramos.
Estas cantidades son muy elevadas para la organización, que precisa que la ingesta de colesterol debe limitarse a 300 mg al día, aunque explican que los niveles en sangre se relacionan más con la presencia de grasas saturadas en la dieta que con la ingesta del propio colesterol.
En este sentido, la Organización señala que es la grasa lo que hace a estos alimentos apetecibles, sin embargo no debería ser una excusa y llamaron a los fabricantes a esforzarse por incluir en sus productos sólo la grasa que sea imprescindible y sobre todo la más saludable.
Por ejemplo, que eviten las grasas trans, ya que son las que aumentan los niveles de colesterol y las únicas que son inútiles para el cuerpo humano. De hecho, los expertos aconsejan no consumir este tipo de grasa, mientras que las saturadas, polisaturadas o monosaturadas aconsejan que se consuma hasta un 10%.
Las galletas, un 94% de saturadas
Sin embargo, tampoco la cantidad de estas últimas grasas se controla. De hecho, el informe señala un porcentaje preocupante en saturadas como es el de las galletas Artinata Artiach que contienen hasta un 94% de este tipo de grasa. Otras marcas como Filipinos Krafft, Creme tropical de Gullón, Chiquilín Artiach y Fontaneda Digestive contienen más del 50% en saturados.
También es elevada la cantidad de grasas en los aperitivos, como el 74% de saturadas que incluye el producto Tuc Tuc Bacon o Snacks craques Mini Río que marcan un 63%. El documento señala que los productos con menos grasas son los panes blancos.
Del estudio se desprende también que los fabricantes usan y abusan de los aceites de palma y de coco, muy económicos y fáciles de manipular. Sin embargo, ambos se consideran poco beneficiosos para la salud. En la calidad global de la grasa, la OCU valora el porcentaje de grasas saturadas y de grasas trans. El 52% de los productos obtiene una mala nota, un resultado preocupante.
Fuente: el país.com
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No, si al final descubrirán que el vino produce cáncer.
ResponderEliminarLa verdad es que las patatas chips, si tienen grasa, pero no siempre es fácil prescindir de aperitivos que están arraigados, a quién no le han puesto un platito de patatas en una visita... y si no picas casi insultas.
Salu2
Me encantan las patatas fritas de bolsa, bueno todas, a partir de hoy ya me lo estoy pensando.
ResponderEliminarSaludos.