(publicado en el pais.com)
El motociclismo español está de fiesta desde que Jorge Lorenzo ha irrumpido como un trueno en el Campeonato del Mundo de MotoGP. Hasta la entrada en escena de este irreverente veinteañero mallorquín, Dani Pedrosa era el único español que había tenido posibilidades de ganar el certamen más elitista desde que Sete Gibernau se batió con Valentino Rossi en 2004, el año en que el italiano dejó Honda y fichó por Yamaha.
Nunca dos españoles habían estado al frente de la categoría reina
La fulgurante aparición de Lorenzo -acumula un segundo y un tercer puesto en sus dos primeras carreras-, la rivalidad que arrastran desde que se batían en 250cc y su juventud -Pedrosa tiene 22 años y Lorenzo 20- auguran brega para años en MotoGP y un futuro de lo más esperanzador.
Aunque el campeonato acaba de comenzar, la historia nunca había asistido a una lucha por la batuta de la clasificación de las motos pesadas entre dos españoles, lo que ahora ocurre con Pedrosa, el líder, y Lorenzo, que ocupa la segunda posición con cinco puntos menos. Y, según dictan todas las predicciones, este mano a mano va para largo. Así lo deja entrever la enorme calidad que atesoran ambos y que se pone de relieve cada vez que salen a la pista. Ayer mismo, Lorenzo volvió a ser el más rápido en los entrenamientos celebrados en Jerez. De hecho, sólo seis españoles han conseguido ganar alguna carrera en la cilindrada máxima: Alberto Puig, Àlex Crivillé, Carlos Checa, Gibernau, Pedrosa y Toni Elías.
Crivillé es el único que se ha coronado en la categoría reina y, además, es el que más triunfos suma (15). El de Seva alcanzó la primera victoria en la octava carrera que disputó. Lógicamente, fue en su primera temporada (1992), en el circuito holandés de Assen y cuando sólo tenía 22 años. "Fue una suerte porque Schwantz y Lawson se fueron al suelo", recuerda el catalán, sorprendido por la capacidad de adaptación que ha demostrado tener Lorenzo. "Pensaba que le costaría más, pero tiene mucho talento y, además, la electrónica de las motos actuales facilita que los novatos vayan rápido pronto", considera Crivillé. "En mi época se necesitaba un periodo de adaptación mínimo de una temporada para controlar las motos de dos tiempos. Y luego estaban los pilotos norteamericanos, que entraban derrapando en cada curva", rememora convencido de que el pique que hay entre Pedrosa y Lorenzo les hará más fuertes a los dos. "Está claro que pelearán por los títulos de los próximos años. Y a esta lucha se añadirá Stoner. La rivalidad que existe entre ambos les empujará a mejorar y les hará crecer", ahonda.
Tras ganar dos títulos consecutivos en dos y medio, Pedrosa se adjudicó la cuarta carrera que disputó en MotoGP, en Shanghai, cuando tenía 21 años. Ahora, Lorenzo, que también es bicampeón del cuarto de litro, tiene 20 y tiempo para superar el registro de su rival.
"Por la forma en que están pilotando los dos", tercia Ángel Nieto, trece veces campeón del mundo -nunca lo fue en 500cc-, "en un par de años van a convertirse en dos tíos muy difíciles de batir en la pista". "Aunque sólo lleva dos carreras en MotoGP, Lorenzo ya está para ganar y Dani ya lo ha hecho [cinco veces]", conviene. Y cierra: "Pero en MotoGP hay mucha calidad. Es la mejor parrilla del mundo".
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