¿Entonces no habías tardado tanto? ¿Él lo llegó a saber? ¿Te quedaste fuera de algo por culpa de un cronómetro estropeado? Esta historia parece de Kafka.
Aquel cronometro era muy bueno para la época. Pero ten en cuenta que estamos hablando del año 1964 y entonces no estaban hechos para correr moviendo los brazos con rapidez.
Nosotros los atletas nos hemos llevado muchos chascos con la toma de tiempos. Algunas veces los jueces se distraían o se equivocaban, y te daban un tiempo que no correspondía al que habías realizado. Aquello nos afectaba mucho; ya que al intentar superarnos, el conseguir un buen tiempo era lo que más nos ilusionaba. Era la única referencia que teníamos de nuestro estado de forma. Saludos.
¿Entonces no habías tardado tanto? ¿Él lo llegó a saber? ¿Te quedaste fuera de algo por culpa de un cronómetro estropeado? Esta historia parece de Kafka.
ResponderEliminarAquel cronometro era muy bueno para la época. Pero ten en cuenta que estamos hablando del año 1964 y entonces no estaban hechos para correr moviendo los brazos con rapidez.
ResponderEliminarpero era injusto, tuviste que sufrir con eso
ResponderEliminarNosotros los atletas nos hemos llevado muchos chascos con la toma de tiempos. Algunas veces los jueces se distraían o se equivocaban, y te daban un tiempo que no correspondía al que habías realizado. Aquello nos afectaba mucho; ya que al intentar superarnos, el conseguir un buen tiempo era lo que más nos ilusionaba. Era la única referencia que teníamos de nuestro estado de forma. Saludos.
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